Un proyecto social cooperativo permite de creación de puestos de trabajo y el desarrollo económico y social de una ciudad facilitando la atención socioasistencial de las personas mayores a través de la participación de las mismas agrupadas en cooperativas para, en colaboración con los ayuntamientos, crear complejos residenciales asistidos como una opción alternativa y complementaria a las residencias, centros de día, etc.